jueves, febrero 10, 2005

Top TEN pedas (ésta es la mas reciente)

Son las 2 am.

Escucho gritos afuera de mi casa.

Acabo de llegar a las 12.45 am y tenía un chingo de sueño después de venir manejando tanto y echar carreritas en la carretera con una EcoSport roja. La diversión se acabó cuando la camioneta en un increíble acto de pendejex casi se estampa de frente contra un autobús de la línea ORO, a partir de ese incidente, la EcoSport siguió su viaje a 80 km/h, siendo que veníamos a 150 km/h bajando las curvas, me uní a su escamación e iba atrás de ella a su misma velocidad, después de 5 minutos, me aburrí, lo rebasé en el puente y seguí mi camino. El miedo no anda en burro.

He visto muchos accidentes en las carreteras, viajo todos los fines de semana desde hace mas de 14 años. Hay carreteras que conozco muy bien, México-Cuernavaca (La pera), Cuautla-Cuernavaca por la pista, Cuautla-Puebla, México-Querétaro, Querétaro-León, León-Guadalajara. He visto coches destroxados, cadáveres saliendo, carbonizados, etc. En el periódico una vex fui de pegostre con los reporteros gráficos (fotógrafos) a un camionazo de peregrinos rumbo a Chalma. Murieron mas de 40 personas, el chofer salió vivo y se peló. Ese día vi todos los muertos que debía de ver en mi vida. Vi un pie sin cuerpo, una mano que no era la mano pachona y vi algo que me llamó mucho la atención: era una parte de cuero cabelludo tirado ahí, como si alguien hubiera dejado abandonada una peluca, pero en este caso no era una peluca, era parte del cabello de alguien. Eso se me ha quedado en la mente muy grabado.

Los gritos eran del pinche N. Antigüo compañero de la preparatoria. Casado y con dos hijos. Creo que el niño, el mayor, lo odia. El otro día que lo fuimos a sacar de una fiesta para irnos a chupar, el niño nos dijo:

-Se van a llevar a mi papá?
-Si
-Y es necesario que lo regresen?
-Si
-Mmmm, buenooo…
dijo como ya resignado a que su papá regresara.

La esposa de N le dijo al niño: Cuando veas a estos llegar, es que se lo van a llevar a tomar. Míralos bien, para que a la próxima me avises. El niño nos analizó con la mirada a cada uno. Jajaja, nos sentimos como sospechosos de la futura infelicidad del chamaco.

Después del milésimo grito, bajé a ver que pex, no me gusta que estén gritando afuera de mi casa y menos en la madrugada, bajé en calzones, bueno en bóxers ya que desde hace muchos años, como 10 para ser exactos, no uso mas que bóxers, a mi me vale madre salir así a la calle. N estaba afuera de la casa fumando nervioso y recargado en un árbol. Su auto estaba estacionado en un lugar oscuro.

-Qué chingaos quieres? fue lo primero que le dije.
-Espera, aguanta, como estás? hablando con falsa cortesía.
-Jetón.
-Oye espera, tápate, al mismo tiempo que me metía hacia el patio, lo vi muy sospechoso.
-Qué pasa?
-Es que ahí en la nave traigo unas morrillas. Y ya te vieron en calzones.
-No son calzones, se llaman bóxers.
-Lo que sea es lo mismo
, dijo esto volteando y sonriendo nervioso hacia el auto con la misma risa estúpida que le conoxco desde hace mas de 13 años. Era para calmar a las chavas nerviosas.
-Ayúdame, vamos a salir con estas chavas.
-Mmmm, quiénes son?
-Unas amiguitas, pero son 3 y necesito que me hagan el paro con las otras dos.
-Y quién será el 3º?
-E. Ya la hablé y nos está esperando. Me dijo que pasara por ti, vi tu coche.
-Pero no grites cabrón, me espantas, pareces La Llorona.
-Vas o no?
-Si, deja me cambio y bajo
.

Subí las escaleras hacia mi recámara. Busqué mi pantalón y con la mayor calma del mundo me los puse, tomé la playera puerca de 2 días de uso, mis botas mineras y mi cartera. Revisé que tuviera dinero, me da una weba enorme pasar al cajero a disponer de dinero. Con 300 la hago. Me asomé por el balcón a ver a N. Estaba dentro de su coche y se veía una gran nube de humo dentro.

Cuando salí empezó a tratar de hacer arrancar su nave. Como de costumbre, su chingadera no prende a la primera, muchas veces lo hemos tenido que empujar para que encienda el motor. Le dije que nos íbamos en mi coche para evitar problemas, deja tu coche ahí a un lado, bajo los árboles, para que si pasa alguien conocido tuyo o de tu vieja, no vea el coche.

Arrancamos a casa de E. N iba atrás con dos morrillas y yo adelante con una. K se reía de una manera extraña, recordé el humo sospechoso y solo me reí. Ella puso su manita en el freno de mano y como tengo la costumbre de usarlo seguido, pues sin querer al tomar la palanca tomé su mano. K se rió y me miró de una manera que hasta ya se me había olvidado, hacía mucho tiempo que nadie me miraba así. La siguiente parada de mi mano fue sobre su pierna. Para tener 2 minutos de conocerla esto va muy bien.

Llegamos a casa de E. Apenas a los dos segundos ya estaba afuera de la puerta, estaba como desesperado. Dónde andaban? Porqué se tardaron tanto? Ohhh como jodes. Atrás N estaba muy entretenido con L, H no daba señales de vida, por lo mismo E se subió junto a K adelante, K se recargó en mi hombro y sus piernas fueron inspeccionadas por mi mano derecha. E inspeccionó la pierna derecha de K. Era una revisión a fondo.

Paramos en el respectivo OXXO en busca de elíxires de Baco. Ahí adentro ideamos el plan. Era comprar alcohol, viajar hacia un paraje desconocido, apartado, oscuro y ahí improvisar. OK.

El lugar lo puse yo, uno de los terrenos que estoy fraccionando era el lugar ideal. Estaba como a 3 kms de la ciudad por una carretera que va hacia un rancho que fue una hacienda en la Revolución. Al llegar a cierto paraje, tomar una desviación como de 2 km hacia dentro. El terreno estaba ya seccionado y la máquina ya tenía trazadas las calles. En el fondo hay una barda de piedra junto a un pequeño río. Completamente lejos de la civilización, con el cielo estrellado, como un mapa coordenado y los volcanes Popo e Izta de testigos.

Cuando llegamos N no se quiso bajar del coche. Volteamos a ver y N tenía completamente desnuda a L. La besaba mientras con una discreción absoluta (N dixit) le metía la mano bajo la falda a H. H no se inmutaba, parecía en otro planeta, solo reía y tenía la cabeza hacia atrás. Disfrutaba.

No quisimos interrumpir el cuadro. Bajamos E, K y yo. K tenía una bacha que escondió en el cenicero de mi coche. Saqué el cenicero de su lugar, le di su bachita y lavé el cenicero en el río. No me gustan esos olores en mi nave.

Sacamos la botella de tequila de medio litro que compramos, le di dos tragos y se la pasé a E. Acto seguido abrió la puerta del coche y se la ofreció a N. Las nalguitas de N, blancas y chiquitas se movían con singular ritmo. E tuvo que colocarle la botella en la boca a N con tal de que no se “distrajera” de lo que estaba haciendo. Le dio como tres tragos y dijo: “Cierren la puerta chingá, se mete el frío”.

K pidió un trago, bebió como desesperada, cuando a E le llegó el turno de beber estaba la botella a la mitad. Tequila barato, aún tengo el sabor caliente, dulzón y rasposo en los labios. Bebió y puso la botella en la orilla del río. Pa´que se enfríe dijo.

Me senté en una piedra y le dije a K que se sentara en mis piernas. Lo hizo. Ah cabrón, esta está media pesadita. Agarró mi cara entre sus dos manos y me besó. Beso mexcla de chumiki, alcohol barato y perfume horriblemente penetrante.

Ah Ah Ah Ah. Gemidos. Un golpe. Suspensión rechina por falta de servicio de engrasado. Pinche N parecía que se estaba muriendo o que gozaba a lo cabrón. Me dieron ganas de caminar. Me levanté mientras dejé que E disfrutara a K. Empezaron a fumar juntos. Caminé hacia el extremo opuesto del terreno. Revisé los escombros de la construcción recién comenzada en el lote 43. Era de una maestra normalista que tiene 4 hijos en EU, Detroit, Chicago, Texas y Arizona. Ellos le han comprado el terreno y le mandan para que empiece a construir. Se ve que van con prisa, pienso mientras pateo la criba de los albañiles.

Desde lejos observé mi auto, un ligero movimiento se observaba. Después N contó que se siguió de filo con H después de terminar su labor con L. Tenía bastante hambre. Desde ese día veo con desconfianza a N. No vaya a ser que lo tope con hambre y me agarre y……….. no, mejor no le sigo. Paso.

Eran ya las 3.25 am. Ah chingá, tan poco tiempo ha pasado?. Todas estas cosas se hubieran pasado volando si estuviera jetón en mi casa. Me siento relajado, tranquilo, ya no estoy cansado. Regreso a mi coche y asomo mi cabeza por la ventanilla trasera, me recibe L con tremendo beso.

Guácala, dije, me dio asco, quién sabe qué chingaos acaba de tener L en sus labios y me da tremendo beso. Solo de imaginar lo que de seguro pasó por sus labios me dio asco. Me zafé y abrí la puerta. N estaba descansando entre las piernas de L y H. Ambas estaban completamente desnudas. Mmmmta… dije, solo falta que una de estas viejas mariguanas, pendejas y borrachas deje una prenda en el auto y mi vieja lo revise y me la haga de tox.

Le toco los pezones a L, al tocarlos mis dedos quedan impregnados de ¿saliva?, guac….. Hago lo mismo con H. Están limpios, los aprieto con ganas, pa´que sufra, mmm, se veían realmente besables.

Adentro de mi coche se sentía un humor bastante cargado, el sudor, excitación, rastros de bachas, alcohol y saliva de tres cuerpos desnudos era un amasijo de olores. Fue en este momento que reparé que N estaba desnudo. Pinche N, vístete……..

Vuelvo al lugar donde dejé a E y no estaba. Busqué la botella y tampoco. Afinando la vista vi dos cuerpos mas allá de la barda. Voy y los veo a los dos desnudos. E y K. Solo estaban manoseándose. Está re fría la piedra manito, me dijo E. La calenté con el encendedor. Le pregunté por la botella. K dice que la tomó, bebió y la dejó en el mismo lugar. De seguro el río se la llevó, en su pinche estado no calculó bien. Ni modo.

Vámonos, digo. Sin pomo ni vieja no me gusta estar.

N se viste, E también, K solo se pone el pantalón, dice que quiere recibir el aire en su pecho desnudo. H no puede vestirse sola, L la ayuda. Arrancamos para mi casa, para que N arranque su madrola y las lleve a dejar. Arrancó a la primera en medio de pinches arrancones que de seguro han despertado a media ciudad. Hacemos el cambio de mi coche al suyo.

Cuando se salen K, H, L y van entrando al coche de N me van dando un beso cada una.

K me agarra en medio de las piernas y se ríe. Mete la mano por dentro de mi pantalón, saca la mano, se chupa un dedo y se ríe.

H solo me da un beso en la mejilla, nunca supo ni que pex.

L toma mi mano y se la mete por debajo del vestido rojo con negro que portaba. Toco su sexo, húmedo y caliente aún. Mmmm no está mal pienso. Al sacar mi mano hizo el intento de que me chupara un dedo, discretamente se lo pasé por su cara y ella lo chupó. Se rió y bajó los ojos. Eran las 4.30 am.

Entré a mi casa, me dormí. Desperté a eso de las 11 am. El calor.

Me llama N a mi casa. Digan que no estoy. Fui a buscar a E a su trabajo. Me dice que las dejaron en una glorieta de la carretera hacia México, al otro lado de la ciudad. Qué no las fueron a dejar a su casa? Es que N no tenía gasolina por eso las dejó tiradas en la carretera. N se quedó con el celular de H. Ah por lo menos las pueden localizar. Noooo, se chingó el celular de H y a L le sacó 500 pesos de su bolsa. Me enseña el celular. Era un Blue-Eye de Samsung. Chido.

Yo: Y de dónde las sacaron?

E: No sé. N se las encontró en un antro. Me dijo “E, ponte listo que hoy si hay desmadre”.

Yo: A mi me gustó K. Le dije.

E: No se llaman así.

Yo: ?

E: N les puso esos nombres. Estaban tan pasadas e intoxicadas que ellas ni siquiera se acordaban de cómo se llamaban.

Yo: Entonces?

E: Pues esperamos a que H llame preguntando por su celular y las volvemos a contactar.

Hasta el día de hoy no ha llamado.

El celular se ve bien chido en mi cinturón. Y tiene buena recepción eh? Se los recomiendo.